Mundo diferente

Alice Mensajes : 42 Ocupación : Fugitivo

El recorrido por aquel mundo era un caos, tanto que parecia ir, podia venir, cuando pensaba que estaba ante la salida de algo, solo se daba cuenta que estaba mas perdido, asi fue como llego a un punto de lo mas extraño, estaba frente a una enorme puerta roja, lo extraño en si no era la puerta, si no el sitio donde estaba, en medio de dos hongos, si algo habia aprendido en su breve periodo hasta el momento era que que mas valia ser curioso o podia no avanzar a absultamente nada fue asi que empujo aquella puerta sin remordimiento o miedo alguno.

Tema: Re: Mundo diferente Jue Oct 20, 2011 5:23 pm

Spoiler:

Aquel era un día como otro cualquiera, salvo porque ya estaban casi a finales de mes y era entonces cuando le tocaba ir al Barrio Rojo a hacer su examen sorpresa de la calidad del servicio, y asegurarse de que las normas impuestas en aquel lugar se cumplían, por muy absurdo que aquello le pareciera a la mayoría de Wonderland, tan llena de locuras y excentricidades que hacía que para muchos el tener unas normas y seguirlas fuera una "completa locura". Por suerte para él, la visita fue breve y satisfactoria en los pocos locales que había visitado, permitiéndose recorrer el pequeño bullicio que había en sus calles, quedando parado cerca de la entrada con uno de sus típicos kimonos, admirando lo que le rodeaba, orgulloso, ignorante de la llegada del menor y de lo que aquel lugar lleno de luces y vida podría llegarle a impactar.

El Barrio Rojo no era tan indecente como los "extranjeros" se imaginaban, poseía múltiples locales de diferentes índoles y variedades. Ese "pequeño" barrio se encontraba dividido en tres zonas, mezcladas unas con las otras, únicamente distinguibles por el color de las banderas y los símbolos que colgaban discretamente al lado de cada puerta. Primero estaban los lugares de ambiente con banderas lilas, luego los locales heterosexuales que eran rojas, y finalmente los mixtos de color verde. También estaban las estrellas estampadas en estas banderas: una para locales inocuos (bares, locales con conciertos...), dos para los "semi" (pubs y discotecas que solían contar con salas VIP, y hoteles), y tres para indicar los clubs de acompañantes y otros espectáculos. Finalmente, para indicar si un host club o similares de ambiente era para gays las estrellas eran azules, y si era exclusivo para lesbianas estas eran rosas. Y no se podían olvidar de los lugares dedicados al consumo de opio, escasos y casi siempre exclusivos señalizados con una bandera negra y un trébol de cuatro hojas estampado en ella, si estaba dedicado a un público en especial una barra lila, roja, rosa o azul la atravesaba diagonalmente. ¿Si alguien lo cuestionaba? Nadie se metía en la vida de nadie, era lo bueno de Wonderland, cada uno iba a lo suyo, y lo que pasaba en el Barrio Rojo se quedaba en el Barrio Rojo, exceptuando las parejas que llegaran a formarse allí y decidieran seguir a la "luz del mundo".

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Gente por todos lados, iban y venian entrando en los negocios con tan peculiares banderas, los fuertes aromas que emanaban de los locales con banderas negras de treboles con lineas tenian su atencion completamente captada, ahi la gente que salia tenia un aroma exquisito en la sangre casi embriagante, pero seguia estando el detalle de la falta del dinero.

Anduvo por ahi mirando los locales, el ambiente que presentaban cada uno sin poder decidirse propiamente por alguno, pedir trabajo quiza estaba en sus planes, necesitaba dinero del lugar y un sitio donde quedarse.

Termino por sentarse en un sitio donde no estorbara, mirando atentamente las banderillas, tratando de decirse entre los grupos alegres de personas para entrar finalmente a algun sitio, cuando una persona llamo su atencion por completo. alguien con un aire diferente del resto de personas.

Tema: Re: Mundo diferente Sáb Oct 22, 2011 7:15 am

Su mirada escrutadora recorría todo el lugar, analizando a la gente, viendo a dónde entraba y de dónde salían, guardando toda aquella información en su extensa memoria, percatándose de hasta los más ligeros cambios en quienes le rodeaban, conociendo sin que muchos de ellos lo supieran, a cuanta persona entrara en su barrio, incluso llegando a conocerlos mejor de lo que aquellos simples mortales se conocían a si mismos. Inesperadamente, una nueva "variable" entró en su mundo, lo reconoció en cuanto le vio, una nueva Alice había llegado a Wonderland, era una "suerte" que tuviera en la biblioteca de su Hongo todas las defunciones, nacimientos y "mudanzas" producidas en aquel universo en el que vivían, con nombres, fechas y hasta fotografías, por algo se le conocía como el Diario de Wonderland.

Dejando de lado sus divagaciones su mirada se centró en el vampiro que parecía mirarle con tanto interés, dedicándole una de sus afables y misteriosas sonrisas mientras se acercaba al recién llegado, sentándose a su lado, sin dejar de mirarlo, perdiéndose en sus orbes amatistas.

-Eres una Alice...

No había duda alguna en su voz, mostrándole claramente al menor que no era una pregunta, sino más bien una total y completa afirmación, dejándole ver claramente que sabía "quien" era, sin plantearle en ningún momento la reacción que podría causar en el menor.

-Pero no te preocupes, nadie más se ha dado cuenta... Aunque aquí trabajan muchos como tú...

Hizo una pequeña pausa, dejándole tiempo al de cabellos platinados de procesar la información, y que viera que no estaba en peligro alguno, a pesar de que algunas miradas curiosas se habían parado a ver aquella curiosa e insólita situación.

-Mi nombre es Kalen...

Su cabeza se inclinó ligeramente hacia la izquierda, permitiendo que los largos mechones de su flequillo se inclinaran suavemente hacia ese lado, dejándole ver al más joven la curiosidad que despertaba en él.

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-Si... soy una Alice.-

Menciono embobado por la persona aquella, aquel ademan le saco varios colores del rostro, el sentirse atrapado en semejante forma por culpa de la curiosidad parecia dejarle un sentimiento de culpa, era un extraño en un mundo de ajenos, no tenia voz, voto, ni derechos y aun tenia la osadia de molestar a los pocos habitantes que le trataban con un poco de amabilidad con semejante falta de respeto.

-Perdon... es la primera vez que yo veo...-

Las palabras se ahogadone los labios del albino mientras movia la cabeza en negativa y se mantenia agachado para pedir disculpas a ese hermoso ser que le mostraba cierta amabilidad

Tema: Re: Mundo diferente Vie Oct 28, 2011 3:39 pm

El repentino cambio en la tonalidad del rostro de su acompañante no hizo más que aumentar su sonrisa, ya que nadie relacionaría a alguien con un aspecto como el que tenía el de cabellos platinados con la timidez que le estaba mostrando, porque de lejos le había parecido alguien seguro de si mismo, alguien que ha vivido más de lo que su apariencia pueda contar, pero también era cierto que un cambio de mundo como el que el más joven había sufrido era suficiente como para trastocar a cualquiera, aunque solamente fuera durante unos momentos.

La voz del menor entró en su mente, masculina y expresiva, llena de una sinceridad emocional de la que muchos en aquel mundo carecían, haciendo que con sus simples y entrecortadas palabras llegara a parecerle alguien digno de tener en cuenta, manteniendo su interés.

-No te preocupes, para mi es normal que me miren... No suelo iniciar conversaciones con desconocidos, y eso llama la atención.

Si eso era o no lo que preocupaba al joven vampiro no importaba, lo que contaba era que el Alice se sintiera cómodo y no tuviera ningún problema con su presencia allí, que pudiera adaptarse a los grandes cambios que sufriría su vida a partir de ese momento.

-Sé que todo esto es nuevo para ti. Digamos que estás... En la fase de transición, para cada persona es distinta, algunas no son capaces de aceptarlo y vagan por Wonderland sin tener cuidado alguno de si mismos, otros se adaptan y viven aquí casi como uno más... Por último, están los que hacen ver que se adaptan pero buscan la manera de volver... Sea lo que sea lo que decidas, evita a las Rosas y a la Reina Roja... Y te recomendaría que evitaras a cuanto Master te encontraras... A parte de mi no puedo asegurarte lo que los demás piensen... Aunque aquí estarás a salvo.

Se puso a divagar por unos segundos, dejando así espacio al menor para que analizara sus palabras, y formulara sus dudas en sus pensamientos.

-Sea lo que sea que necesites saber puedes preguntármelo... Te ayudaré en lo que necesites, y si necesitas trabajo también puedo ayudarte con eso.

Una sonrisa más alegre y misteriosa se pintó en su rostro. A pesar de lo bien que el inmortal le pudiera caer, en su mente aún seguía pendiente aquel puesto vacante para uno de sus locales.